“Lo pinto con un poco de remolacha”, aclaró la dueña de Peque, el perrito rosado

Mónica Martínez es la vecina del barrio Universitario, en Bahía Blanca, que cobró mucha notoriedad pública en las últimas horas, a raíz de la publicación de unas fotos que dan cuenta de su perro, un caniche al que tiñe de rosa para que haga “juego” con su propio cabello.

La mujer contó que “mi perro tiene flequillo azul, pero lo tiño con colores de la torta. A veces ando con el pelo verde o violeta, me encanta teñirme. Lo hago con fantasía porque soy alérgica, entonces me dura pocos días”.

“Vivo en Villa Mitre en realidad. A ‘Peque’ lo tiño desde siempre, pero ahora estoy acá -barrio Universitario- porque mi papá tiene 88 años y lo estoy cuidando”.

“A veces lo lavo con remolacha y por eso queda rosado. Él se lame un poco y le queda más o menos intenso, después lo va dejando en los sillones y frazadas”, indicó.

Y consultada respecto de la reacción de grupos mascoteros, señaló que “es color de torta, de los que se comen –colorantes-, si él lo lame no le hace nada. (LB24)