Al estar absuelto puede retomar su cargo y dirigir de nuevo la Fiscalía General Federal.
A 24 horas del polémico fallo del TOC que absolvió al Fiscal General Federal Alejandro Cantaro, por cuestiones de forma, siguen surgiendo las repercusiones de la decisión. El tribunal culpó al fiscal Gabriel González Da Silva, de haber cometido “errores insalvables” a la hora de la acusación y señaló que no le quedó otra opción y que por ello no analizó la prueba que lo señalaba de encubrir una banda de narcotráfico.
Cantaro quedó sin sanción por “errores técnicos” cometidos por el Ministerio Público Fiscal o por una errónea interpretación del tribunal. En distintos ámbitos judiciales, la cuestión está dividida y algunos sostienen que es técnicamente válido lo que hizo el fiscal y que sorprendió lo del Tribunal. Otros, en cambio, dicen que el fiscal se equivocó, un error que terminó curiosamente beneficiando a Cantaro.
Más allá de que la decisión del TOC se apele, como ya lo adelantó Da Silva que hará, o se realice un nuevo juicio oral con las pruebas ya relevadas, pasarán meses o años.
Así las cosas, Cantaro, aunque parezca increíble, está en condiciones de volver a su despacho de la Fiscalía General, de la que está autolicenciado (tiene carpeta psiquiátrica). Podría regresar hoy mismo a su despacho de la Fiscalía General en calle Mitre, y se convertirá, si él quisiera retomar su cargo, en el jefe de Da Silva, su acusador que hace una semana le pidió siete años de cárcel por considerarlo integrante de una banda narco. Lo más bizarro en la Argentina, puede convertirse en realidad.
Fuente: LB24
Comments